El Plan de Depuración, Saneamiento, Eficiencia, Ahorro y Reutilización, reconocido por muchos como el Plan DSEAR, es un proyecto de origen español que a lo largo de su exposición de motivos da a conocer las necesidades de reaccionar y aportar una solución a los diferentes inconvenientes que han limitado el avance a los programas de medidas que se relaciona a los planes hidrológicos que se apreciara en un tercer ciclo que comprende de 2021-2027.
Por lo tanto, el Plan DSEAR conforma un nuevo paradigma de gestión en el ámbito de la Administración General del Estado y de asistencia con el resto de las jurisdicciones competentes con relación al tema del agua, principalmente en los sectores de la purificación, el saneamiento y en especial su reutilización.
Aunque contar con un excelente diagnóstico, los proyectos gubernamentales no acaban de acertar en el tratamiento al necesitar de la mejor medicina que es: la inversión.
Debido a este sector del agua urbana cuenta con grandes lecciones que con la ayuda de la tecnología puede quedar evidente que los servicios de los ciudadanos para mejorar el círculo infinito del agua necesitan que empresas y otros entes ayuden de forma económica.
Asimismo, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado el año pasado ha ido trabajando en las acciones en depuración, saneamiento, eficacia, ahorro, seguridad y reutilización de infraestructuras por un costo de 255 millones de euros.
Propuestas para evitar multas
De esta manera, resalta actuaciones en perfeccionar la gestión del agua y el procedimiento de las aguas residuales, siguiendo un método integral de las aguas residuales reproducidas como recurso, minimizar las pérdidas y mejorar los métodos de abastecimiento y repartimiento de agua. Igualmente, sobresalen las necesidades de aumentar la reutilización de aguas residuales en ciertos territorios que sufren un estrés hídrico.
Aunque las inversiones apenas sí se utilizarán para ser aprobados por la Directiva Marco de Agua, de forma que desaparezcan las sanciones y multas recurrentes de este país con relación al saneamiento apropiado para los centros poblacionales.
Pero con los desafíos que el cambio climático y el desarrollo demográfico de los centros urbanos indican que esto tendrá grandes resultados a corto y medio plazo, siempre y cuando se mantenga el ciclo integral del agua, la capacidad no vale para mejorar en la transformación hacia los métodos productivos circulares que nos requiere la transición ecológica en la que esta nación está inmersa.
Un cambio de modelo hacia el abastecimiento que el sector del agua urbana en España posee muchas lecciones que aportar y actualmente el país cuenta con mucha tecnología para contar con un servicio completo e infinito del agua con capacidades y desplazamientos sencillos, consiguiendo un producto más seguro para el consumo.