En muchas ocasiones, necesitamos contar con nuestro propio vehículo para nuestro día a día, sea por trabajo o por otras necesidades. Puede que necesites un nuevo coche porque el tuyo ya tiene muchos años, o bien en tu casa necesitan más de un vehículo, ya que los horarios son incompatibles como para compartir un solo coche o bien te acabas de sacar el carnet y no cuentas con un vehículo.
Ante estas necesidades, un elemento importante a la hora de adquirir un vehículo es el precio, ya que debido a su precio se trata de un producto que no está al alcance de todo el mundo. Si te encuentras en esta situación, la mejor opción es recurrir a la venta de coches de segunda mano. Veamos a continuación cuáles son las ventajas de comprar coches de segunda mano en concesionarios especializados y qué debes hacer si quieres vender tu coche.
Por qué comprar coches de segunda mano en concesionarios
Aunque la principal ventaja ya la hemos adelantado anteriormente y es el ahorro económico, esta no es la única. Que los precios de los coches de segunda mano sean más bajos que los coches nuevos se debe a que estos ya han recorrido una distancia con el anterior propietario y su uso puede haber conllevado a cierto nivel de deterioro. Sin embargo, al comprar un coche de segunda mano en un concesionario, esto no es un problema del que te debas preocupar.
Por un lado, la compra en concesionarios coches segunda mano te da la seguridad de que el vehículo ha pasado una revisión mecánica y las correspondientes reparaciones para ofrecerlo al público en un estado óptimo, sin ninguna avería que tenga que arreglar el nuevo propietario. En algunos casos, cuando compramos coches de segunda mano a sus propietarios de forma directa nos estamos arriesgando a que no nos estén ofreciendo un vehículo en las mejores condiciones posibles, por lo que realizando esta compra con un concesionario evitamos esta duda.
Además, cuando compramos coches de segunda mano baratos en concesionarios, estos nos ofrecen una garantía del producto, por lo que algunas averías motivadas del estado del vehículo, nunca del mal uso, estarían cubiertas por los talleres mecánicos concertados con el concesionario.
Cada concesionario cuenta con unas condiciones distintas, ventajas y promociones que dependen de su oferta, por lo que no dudes en informarte del estado y precio del mismo modelo en varios concesionarios para aprovechar las ventajas que te pueda ofrecer cada uno.
Cómo vender tu vehículo
Cuando compramos un coche ocasión en un concesionario, estamos haciéndonos con un vehículo que previamente fue de otro propietario. Esa operación se realiza a través de las compras que los concesionarios realizan y de las que tú mismo te puedes beneficiar, ya que si tu coche tiene algunos años y va a cambiar de vehículo, puedes vender el antiguo para conseguir un dinero que te vendrá muy bien para comprar tu nuevo coche.
El proceso es sencillo. En su página web introduces tus datos personales: nombre, apellidos, teléfono, correo electrónico y dirección; los datos de tu vehículo, donde deberá aparecer al menos el modelo y la marca del vehículo, siendo complementario y de gran ayuda para una primera tasación detalles como el tipo de combustible que consume, el color, la potencia, el número de puertas, los kilómetros que marca el contador, el tipo de marchas, el año de matriculación y cualquier otra característica que consideres relevante. Finalmente, has de adjuntar fotografías de la parte frontal, la trasera, los laterales y varias fotos del interior.
Para obtener un presupuesto exacto deberá ser analizado por un especialista del concesionario, este medio servirá para que te hagas una idea del valor de tu vehículo.
Por lo tanto, si necesitas un nuevo vehículo y no te importa que este haya estado en otras manos, no dudes en comprar un coche de segunda mano en un concesionario para contar con la seguridad de que se encuentra en perfecto estado.