Aumentar la eficiencia en los procesos de ventas y la calidad de la atención a los clientes es algo inherente a la mejora continua de cada negocio. En el caso de las farmacias, son necesidades imperiosas para ofrecer un mejor servicio y un robot de farmacia puede ser una solución transversal para lograrlo.
¿Qué es un robot de farmacia?
Un robot de farmacia es un sistema automatizado, del que se puede conocer más información aquí, cuyas principales funciones son almacenar y dispensar los medicamentos o productos dentro de una farmacia. Para hacerlo, utiliza sistemas mecánicos que escanean cada uno de los productos dentro del almacén y los sincronizan con un stock al que el farmacéutico tendrá acceso, y cuando solicite un medicamento en dicho stock -o software de punto de venta-, el robot de farmacia se encargará de desplazarse hasta donde está el producto, lo colocará en un riel o en una bandeja especial, llegando directamente a las manos del farmacéutico.
Dicho esto, en palabras más simples, un robot de farmacia es similar a tener un ayudante trabajando a una altísima velocidad en el almacén de la farmacia, permitiendo que los tiempos de atención o los procesos de ventas se reduzcan a mínimos, y permitiendo que el farmacéutico tenga más tiempo para dedicarlo a otras actividades que puedan ser más vinculantes para el éxito de su negocio.
Principales ventajas
- Ahorro de tiempo: un robot de farmacia se tomará tiempos medidos en segundos para encontrar el medicamento adecuado y colocarlo en la bandeja, tobogán o riel al que el farmacéutico tenga acceso. Eso significa que, a diferencia de tomar unos minutos en encontrar manualmente el medicamento adecuado, caminando por los pasillos de un almacén, el robot de farmacia lo hará de forma inmediata. En términos de eficiencia, significa que se podrá atender hasta un 60-80% más de clientes, solo con la inclusión de un sistema automatizado como este.
- Disminución de errores: el stock se mantiene sincronizado, los medicamentos se pueden ordenar de cualquier manera sin seguir ningún orden, porque el sistema escanea convenientemente y sabe dónde se encuentra cada producto. Con un sistema automatizado de gestión de almacén, la disminución de errores será notable.
- Mejor atención al cliente: en las farmacias, la atención al cliente es una parte fundamental para garantizar que los clientes eventuales se conviertan en recurrentes. Por eso, ese tiempo que no se dedica a buscar el medicamento entre los almacenes, se puede dedicar a ser más cercano, empático y abordar mejor a los clientes, de manera que se pueden ganar enteros en fidelización, lo que para una farmacia puede ser sinónimo de calidad y crecimiento.
- Dispensación inteligente: aunque no sucede con todos los robots de farmacia, y convendría revisar cada modelo en particular, los mejores modelos pueden dispensar los medicamentos de acuerdo con la marca o laboratorio patrocinador, de acuerdo con su fecha de vencimiento y otras variables. De esta manera, se podrá optimizar la gestión del stock, puesto que siempre se venderán los productos cuya fecha de vencimiento sea más cercana -por ejemplo-, lo que puede ayudar a reducir los costes en ese sentido.
- Aligerar la carga de trabajo: está demostrado que la mayoría de los robos o hurtos en farmacias ocurren mientras el farmacéutico no está atendiendo el punto de venta, por estar buscando medicamentos o tardar un tiempo adicional en las secciones de almacén. Si estas funciones son llevadas a cabo por un robot de farmacia, el farmacéutico podrá aligerar su carga de trabajo, y podrá hacerse cargo de una atención completa del mostrador y de las secciones a la que los clientes y visitantes tienen acceso.
Los robots de farmacia son sistemas que pueden beneficiar enormemente a este tipo de negocios. No obstante, antes de tomar una decisión, lo mejor será considerar todas las variables que intervienen, al tiempo que no se debe dejar de mencionar el coste, el espacio necesario para una instalación adecuada, y que tiene la necesidad de estar siempre conectado a la corriente eléctrica.