El Quality Investing o inversión en calidad es una estrategia de inversión que se enfoca en seleccionar aquellas empresas que se consideran de alta calidad en términos de fortaleza financiera, estabilidad y potencial de crecimiento a largo plazo. Las características que suelen definir a una empresa de alta calidad incluyen:
Líderes del mercado
Las empresas que son líderes del mercado, operando en condiciones de monopolio u oligopolio, son atractivas para los inversores de calidad por varias razones fundamentales que se relacionan con su posición dominante en la industria y capacidad de fijación de precios.
Fortaleza financiera
Esto se refiere a la solidez de los estados financieros de la empresa, incluyendo altos niveles de rentabilidad, bajos niveles de deuda y flujos de efectivo sólidos. Ello se traduce en que los retornos sean superiores al capital invertido.
Ventajas competitivas sostenibles
Las empresas de alta calidad a menudo tienen una ventaja competitiva sostenible que les permite mantener su posición de liderazgo en la industria. Esto podría ser debido a la tecnología patentada, fortaleza de marca, economías de escala o acceso exclusivo a recursos.
Barreras de entrada
Las barreras de entrada son obstáculos que dificultan o previenen la entrada de nuevos competidores en un mercado o industria existente y que tiene que ver con las mencionadas ventajas competitivas. Estas barreras pueden tomar diversas formas y contribuyen significativamente a la protección de la cuota de mercado y los márgenes de beneficio, así como a su capacidad para generar flujos de efectivo estables a largo plazo. Algunas de las más comunes son: propiedad intelectual, escala, efecto red, marca, coste de sustitución
Crecimiento estructural
Las empresas que califican para inversiones de calidad suelen tener un historial de crecimiento constante en ingresos y ganancias. Esto indica una capacidad para expandirse y adaptarse con éxito a las condiciones cambiantes del mercado ya que operan en tendencias estructurales, como es el envejecimiento de la población (salud, ocio), sostenibilidad (energías limpias, tecnología renovable), digitalización.
Todo ello da a las compañías una capacidad de resiliencia durante periodos de desaceleración y/o recesión.
Fondo quality para invertir en empresas de calidad
Para Santalucía AM, su universo de inversión es de 100-130 compañías de calidad. Los ahorradores pueden invertir en ellas a través de un fondo quality que selecciona a los grandes líderes mundiales. Se trata de Santalucía Quality Acciones, FI., un vehículo que en 2023 acumuló una revalorización anual cercana al 25% a 31 de diciembre, superior a su benchmark, situado en el 18%.
Los gestores de fondos de inversión de esta firma buscan empresas que cumplan con estos criterios, con la expectativa de que mantendrán un rendimiento superior en el largo plazo. Esta estrategia requiere una investigación exhaustiva (análisis fundamental) para identificar estas empresas de calidad y una perspectiva de inversión estable.
“Claramente hay que invertir en compañías de calidad ya que año tras año es la estrategia ganadora y la que a largo plazo refleja rendimientos superiores a los del mercado. No sabemos qué van a hacer los mercados en 2024, pero lo que sí sabemos es que aquellas compañías de calidad componen a lo largo de los años”, afirma Lucía Liñán, gestora Renta Variable de Santalucía AM.
*Las rentabilidades pasadas no son una garantía de rentabilidades futuras y por tanto la rentabilidad de tu inversión puede ser distinta a las pasadas.
**Cualquier inversión en los mercados financieros está sujeta a determinados riesgos, incluido el riesgo de pérdida del principal invertido y/o de ausencia de rentabilidad.