Sexo: ¿cómo mantener la chispa?

Con la rutina diaria, las múltiples obligaciones, las largas jornadas laborales y el consecuente cansancio es posible que las relaciones sexuales de una pareja se enfríen un poco y se distancien. Sin embargo, existen formas de hacer que la chispa arda de vez en cuando y lograr ambientes íntimos relajantes y propicios para el coito. Solo basta la disposición y un poco de imaginación para rescatar el deseo de las garras de la cotidianidad.

¿Sexo con calcetines? ¿Por qué?

Aunque suene un poco loco tener relaciones sexuales con calcetines puede ser una nueva experiencia para sumar a la vida sexual porque ofrece estas ventajas:

• Ayuda a algunas personas a sentirse más relajadas: tener medias o calcetines a la hora del sexo puede hacer que las personas se sientan más relajadas porque calientan sus pies y no están del todo desnudas. Esto crea confianza y relajación para el orgasmo.
• Calienta los pies: tocar a la pareja con pies fríos puede cortar un momento de pasión. Por eso llevar calcetines puede ser algo acertado sobre todo si hace frío. En estos casos son confortables y ayudan a alcanzar más y mejor el clímax.
• Puede ser sexy: dependiendo del tipo de calcetines o medias, pueden lucir sexys o divertidos y hacer que las relaciones sexuales sean algo más original.

¿Cómo mantener la pasión tras años de matrimonio?

Es normal que el ritmo de relaciones sexuales baje tras largo tiempo de casados. Pero, el deseo sexual durante el matrimonio puede persistir aunque de manera distinta. Estos son algunos consejos:

• Planear una escapada: si se tienen hijos se pueden dejar con los tíos y abuelos e ir de viaje rápido un fin de semana como un escape de la realidad y crear un ambiente propicio para el relax y el sexo.
• Comunicación: muchas de las parejas dejan de tener sexo porque dejan de comunicarse. La rutina los consume y los momentos de tirantez que crea la vida diaria puede que cree discusiones y juicios severos uno contra el otro. Eso, indudablemente, mata la pasión.
• Romper la rutina y la pereza: es verdad, estar todo el día en el trabajo y llegar a casa a hacer mil cosas puede generar pérdida del apetito sexual. Por eso se debe planear un día cualquiera una noche romántica. Sí se puede. Solo hay que buscar el tiempo y lo hay.
• Sexo de calidad: no importa que el número de relaciones sexuales disminuya. Lo importante es que cuando se tenga sea de calidad para ambos. En este caso, los hombres deben poner un poco de su parte, pues hay mujeres que les lleva más tiempo el clímax que a los caballeros.
• Coqueteo como algo habitual: aunque no haya sexo, se puede hablar con dulzura, estar presentable y atractivo para la pareja. Sorprenderlo con un regalo, una cena exquisita o buscar una actividad juntos para crear intimidad en la relación y propiciar una vida sexual activa.

¿Qué es el sexsomnio?

El sexosomnio puede considerarse una forma de sonambulismo. Implica numerosos tipos de actividades sexuales que se realizan mientras se está dormido. Puede tratarse de sexo con una pareja o de masturbación. El soñar con sexo de manera recurrente puede ser también esta condición.

Los médicos no están seguros de la etiología exacta del sexsomnio, pero sí saben que suele desarrollarse después de la pubertad y que quienes hablan o caminan mientras duermen tienen más probabilidades de padecerla que quienes no lo hacen.

Los médicos conocen numerosos factores que pueden contribuir con la enfermedad. Entre ellos se encuentran los patrones de sueño irregulares, la tensión, el cansancio y la ansiedad. El abuso de alcohol o drogas recreativas puede fomentar este comportamiento.

La buena noticia es que existe una cura para el sexomnio. Si ciertas situaciones o personas le hacen tener relaciones sexuales dormidos, la terapia, el asesoramiento o la medicación pueden ser útiles.

Mantener un patrón de sueño regular y practicar una buena higiene del sueño también puede ser beneficioso. Se aconseja la abstinencia de alcohol. Además, se recomienda un tratamiento para ayudar a los pacientes a lidiar con el pudor y la humillación.

En cualquier caso se debe acudir a un psiquiatra que determine el patrón médico o tratamiento a seguir.