El Salmo 23 hace mención a la vida, a la muerte, y los momentos de escasez o abundancia, nos da a conocer como nuestro padre celestial es un Dios bueno y digno con cada uno de nosotros manteniendo la confianza. El salmo utiliza la parábola del cuidado y seguimiento de un pastor por sus corderos para representar la bondad, la sabiduría de Dios.
Ofrece esos consejos para que sus seguidores siempre se encuentre ansiosos de compartir la verdad, que subsistir cerca de un guía es siempre el sitio perfecto y seguro para estar, ya que no existe ningún lugar malo somos nosotros quienes lo convertimos así.
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El Salmo nos dice que Jesús, está en cada momento de nuestra vida, él es nuestro Señor y Pastor, que nos mira en todo momento y sabe cuál es nuestro dolor sintiendo simpatía por uno mismo, él se acerca a nuestro sufrimiento en silencio llevando a nuestros pensamiento a un mejor camino.
La sagrada escritura nos dice que en vez de venir el pastor a nuestro lado, el Pastor sale por nosotros manteniendo la fuerza del Todopoderoso, ese ser supremo que es capaz de vencer a cualquier enemigo. Ya que en este mismo capítulo Jesús es anunciado como: “Yo soy la resurrección y la vida; y el que cree en mí, aunque muera vivirá eternamente”. Tal cual como lo dice el evangelio según (Juan 11:25)
Esto hace que el Pastor guie sus ovejas, librándola de la muerte, aun estando en el valle de la muerte, a pesar de todo sufrimiento el Señor está allí para apoyarnos; como buen pastor que da su vida por su rebaño. Mis ovejas oyen mi voz aclama en una de sus frases; Yo las reconozco y ellas me siguen, le puedo dar vida eterna, y no morirán jamás; nadie las quitará de mi mano.
El Salmo 23 es uno de los escritos más conocidos de la Biblia. Se aprende y es repetido en todos los países. Muchos lo llaman como el Salmo universal o la joya de los Salmos.
¿Quien escribió el salmo 23?
Solo un pastor pudo haber escrito el Salmo 23, y fue David quien lo hizo, el solio ser un buen pastor. El Señor es guía de su pueblo y su gente actúa como ovejas obedientes; así que David escribió esa frase que es vista a los largo de la biblia: “El Señor es mi pastor; Nada me faltará.»
Se explica que las ovejas en este magnífico Salmo, es el rebaño del Señor, y en esta vida son aquellos que lo siguen. Jesús lo dio a conocer y en el evangelio según Juan 10:27, es visto diciendo Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las reconozco, y ellas me seguirán”.
Somos hijo de Dios y el Salmo 23 es muestra de ello lo podemos repetir cuantas veces queramos y sentir que entra en nuestro ser. Los fieles seguidores de Dios pueden decir que: «Somos su pueblo, y ovejas de su prado». Naturalmente, no somos parte de un rebaño del Señor. Desde que Jesús vino al mundo quedamos huérfanos y en esta época en que vivimos necesitamos de un verdadero Pastor.
Frases más llamativas del Salmo 23
Me guiará por sendas de justicia
Esta es una de las frases que llegan al alma y la restaura, es entonces llevada a otro plano donde Dios nos lleva a un punto definido en su vida: esta frases nos muestra que Dios nos guiará por los caminos de la justicia y todo será por amor a su nombre”. Es decir, Dios nos lleva a su servicio. Y podemos descansar en los pastos verdes cerca de aguas serenas para el trabajo.
Tú preparas una mesa delante de mi
Al terminar los versículos del Salmo 23 encontramos otra frase memorable es la preparación de la mesa con la presencia de enemigos y una copa rebosa. Pero manteniendo la misericordia de la vida, ya viviremos en la casa de Jehová donde moraremos para siempre” (Salmo 23:5-6).