Tener registros claros y evidentes de las temperaturas apreciadas en el mundo, funciona como un instrumento clave para conocer si nos encontramos sumergidos dentro de una ola de calor, por eso que las estaciones de medición realizadas por Aemet cuenta con una disposición, 137 estaciones, donde 6 de ellas presenciadas en Canarias por tener una continuación lo adecuadamente larga como para deducir los cambios de manera uniformes por toda España.
Los registros apreciados en largas décadas han servido como instrumento que funciona para establecer qué 93 días (5%) han sido cálidos, donde cerca de 1.860 días entre los meses de julio y agosto desde 1971 y 2000 vieron esta temperatura.
Todo lo calculado basado en las temperaturas máximas se fundamenta en el percentil 95% y, de esta forma, las cifras que sean mayores intentarán a ser estimadas como sospechas de olas de calor.
Con estos registros, definidos en tres etapas. Durante la primera fase se consiguen las estaciones con eventos de tres días continuos de temperaturas máximas que superan o igualan la cifra determinada por el umbral.
Los expertos indican que no todas las altas temperaturas se encuentran relacionadas con una ola de calor.
Luego de establecer los días cálidos, considerando aquellas etapas donde cerca del 10% de las estaciones supuestas están dentro de uno de los ‘Eventos cálidos’ situados en la primera fase.
Por lo tanto, localizar las olas de calor, que concentrarán las características específicas. Cabe indicar que cuando dos olas de calor se alejan solo por un día se definen como una ola de calor única.
Para poder identificar una ola de calor, los expertos usan los siguientes pasos
- Procesar las temperaturas de forma independiente.
- Establecer el territorio más afectado dentro de la ola de calor.
Con base a la magnitud, se debe establecer primero las fases que ofrezca un día de ‘Episodio cálido’ para luego puede tomar con referencia las temperaturas máximas durante periodos cálida. Esa suma reflejará la temperatura máxima de la ola. La singularidad de la ola, se fundamenta con las anomalías con relación al umbral.
Los registros presenciados por Aemet indican que en el 2017 solio ser un año con más olas de calor, presenciando en total 25 días. Además, en el 2015 es distinguido por ser el año con una ola de calor más perdurable, con 26 días, para el 2012 presencio una ola de calor más extensa por involucrar 40 provincias.